6 pasos para ayudar a controlar el estrés navideño de los niños
Los niños suelen esperar las vacaciones de invierno con alegría y entusiasmo. A veces, sin embargo, las vacaciones pueden traer consigo factores de estrés nuevos y abrumadores para los niños.
Los niños sufren estrés durante las vacaciones por varias razones. Por un lado, cuando los adultos que les rodean experimentan niveles de estrés superiores a los normales, los niños imitan el modelo. Además, la ruptura de la rutina y el ritmo frenético de las actividades es algo para lo que los niños no siempre están preparados. Por último, las visitas de gente nueva y de otros miembros de la familia pueden abrumar a los niños.
Todas estas cosas pueden ser buenas: es importante que los niños experimenten cosas nuevas, conozcan gente nueva, se mantengan en contacto con familiares lejanos y aprendan a manejar el estrés.
He aquí cómo puede ayudar a los niños a gestionar adecuadamente su estrés durante las vacaciones.
Asegúrese de que duermen bien
Demasiados niños estadounidenses no duermen lo suficiente (Gander, 2019). Las vacaciones escolares de invierno son una magnífica oportunidad para que vuelvan a dormir de forma saludable.
Dormir es probablemente una de las mejores medidas preventivas y para aliviar el estrés. Ayude a sus hijos a mantener sus horarios normales de sueño tanto como sea posible, y permítales dormir hasta tarde. Los CDC recomiendan que los alumnos de primaria duerman entre 9 y 12 horas diarias, y entre 8 y 10 los adolescentes (Centers for Disease Control and Prevention, 2022).
Asegúrese de que hacen ejercicio
Está demostrado que el ejercicio mejora el estado de ánimo y confiere beneficios para la salud mental a largo plazo. "Por término medio, los jóvenes que hacen más ejercicio tienen niveles más bajos de depresión, estrés y angustia psicológica, y niveles más altos de autoimagen positiva", según la Asociación Americana de Psicología (APA, 2020).
También ayuda a aliviar el estrés a corto plazo, al liberar endorfinas, que aumentan el placer. También pone un nivel manejable de estrés en el cuerpo y reduce la producción de las hormonas del estrés cortisol y adrenalina (Harvard Health Publishing, 2020).
Déjales jugar
Las vacaciones son un buen momento para que los niños ocupen su tiempo libre jugando. El juego tiene muchos beneficios: les ayuda a socializar y a establecer vínculos con sus compañeros de juego, suele asociarse al ejercicio y estimula procesos que reducen el estrés en el organismo (Wang y Aamodt, 2012).
Esta época del año también ofrece tiempo para jugar en familia, lo que fomenta la confianza y la conexión. Dedica tiempo a estructurar el juego entre generaciones.
No programar demasiado
Limitar el número de actividades es importante para ayudar a los niños a gestionar las emociones asociadas a esas actividades. Al fin y al cabo, incluso para los adultos puede resultar abrumador ir de un sitio a otro. Tómate tu tiempo para decidir qué es lo realmente importante y no lo agobies con actividades menos importantes. Y lo que es más importante, dedique tiempo suficiente a que sus hijos reflexionen sobre lo que deberían aprender de esas actividades.
Dedique tiempo a la tranquilidad
La reflexión es una poderosa técnica para reducir el estrés y ayuda a las personas a aprender a regular las emociones (Kross, et al, 2011). El tiempo, el espacio y el entorno para la reflexión son cosas que puedes controlar.
Puedes animarles, y dedicarles tiempo, a llevar un diario de las vacaciones. También puedes dedicar un rato al final del día para sentarte alrededor de la chimenea o en el salón familiar a hablar simplemente del día.
Además de reducir el estrés en el momento y hacer que las fiestas sean más agradables, estas oportunidades crearán probablemente los recuerdos navideños más intensos.
Enséñeles el significado de las vacaciones
Ya sea Hanukkah, Navidad, Kwanzaa u otra festividad, hay valores fundamentales asociados a la ruptura. Enseñe a sus hijos cuáles son esos valores. Probablemente incluyan alguna combinación de bondad, gratitud, familia y amor.
Hablar de estos ideales fundamentales y, sobre todo, ponerlos en práctica reducirá el estrés al centrar la mente y dedicarse al pensamiento ejecutivo, alejando la mente de las emociones que pueden causar estrés. Es un camino hacia la atención plena que también viene acompañado de valiosas lecciones sobre cultura.
Limitar el consumo de azúcar
Es fácil disfrutar de dulces y golosinas durante las vacaciones. Pero los padres deben tener cuidado de controlar la cantidad de azúcar que ingieren sus hijos en todo momento, pero especialmente durante las vacaciones, cuando la disciplina puede quebrarse con más facilidad.
El consumo elevado de azúcar se ha relacionado con la depresión y el mal humor. Las razones son complejas y se están investigando científicamente, pero una razón probable parece ser que el azúcar procesado desencadena en el cerebro respuestas similares a las de las sustancias adictivas y puede secuestrar las emociones de una persona (Knüppel, et al, 2017). Disfruta de los caprichos, pero no dejes que los niños se excedan.
La vida es estresante, y las vacaciones pueden serlo aún más. El objetivo de los padres no debe ser eliminar el estrés de sus hijos, sino enseñarles a gestionarlo eficazmente. Sé selectivo con los factores estresantes a los que deben atender y enséñales a regular sus emociones durante las situaciones estresantes.
Referencias
- Asociación Americana de Psicología. 2020. Cómo y por qué hacer que los niños se muevan ahora. Extraído el 17 de noviembre de 2023 de https://www.apa.org/topics/covid-19/children-exercise-strategies
- Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. 2022. ¿Cuánto sueño necesito? Extraído el 17 de noviembre de 2023 de https://www.cdc.gov/sleep/about_sleep/how_much_sleep.html
- Gander, Kashmira. 2019. Los niños estadounidenses no están durmiendo lo suficiente y está afectando su éxito en la escuela, advierten los científicos. Newsweek. 25 de octubre de 2019. Consultado el 17 de noviembre de 2023. https://www.newsweek.com/american-kids-arent-getting-enough-sleep-its-affecting-their-success-school-scientists-warn-1466882.
- Harvard Health Publishing. 2020. Hacer ejercicio para relajarse. Extraído el 17 de noviembre de 2023 de https://www.health.harvard.edu/staying-healthy/exercising-to-relax
- Knüppel A, Shipley MJ, Llewellyn CH, Brunner EJ. Ingesta de azúcar de alimentos y bebidas dulces, trastorno mental común y depresión: hallazgos prospectivos del estudio Whitehall II. Sci Rep. 2017 Jul 27;7(1):6287. doi: 10.1038/s41598-017-05649-7. PMID: 28751637; PMCID: PMC5532289.
Kross, E.; Duckworth, A.; Ayduk, O.; Tsukayama, E.; & Mischel, W. 2011. El efecto de la auto-distancia en la auto-reflexión adaptativa versus maladaptativa en los niños. Emotion. 11(5), 1032-1039. https://doi.org/10.1037/a0021787 - Nijhof, Sanne L.; Vinkers Christiaan H.; Van Geelen, Stefan M.; Duijff, Sasja N.;
E.J. Marijke Achterberg, Janjaap van der Net, Remco C. Veltkamp, Martha A. Grootenhuis, Elise M. van de Putte, Manon H.J. Hillegers, Anneke W. van der Brug, Corette J. Wierenga, Manon J.N.L. Benders, Rutger C.M.E. Engels, C. Kors van der Ent, Louk J.M.J. Vanderschuren, Heidi M.B. Lesscher. 2018. Juego sano, mejor afrontamiento: La importancia del juego para el desarrollo de los niños en la salud y la enfermedad. Neurociencia y revisiones bioconductuales. Volumen 95,
2018: 421-429 - Wang, Sam y Aamodt, Sandra. 2012. El juego, el estrés y el cerebro que aprende. Cerebrum. Publicado en línea 2012 Sep 24.